Una de las cosas que más me gustan del ambiente de mi aula, es que transmita: alegría, colorido y que sea significativo. Por ello, procuro crear espacios del aula cuidadosamente decorados. Donde los dibujos se adaptan a la necesidad del momento: el proyecto, la actividad o el contenido que desee desarrollar. Me gusta creer que mi clase, es un reflejo de mi labor educativa.
La primavera ha llegado y en mi colegio E.I. "El Faro" le dimos la bienvenida con la fiesta de los
"Huevos de Pascua con chocolate y ABN". Para seguir, dando un toque primaveral a mi clase de 5 años, se me ocurrió la idea de decorar las paredes, y qué mejor que, enmarcarla en una actividad matemática basada en el algoritmo ABN.
Quería que en el mural quedara reflejado el aprendizaje de los alumno/as de mi clase, y pensé que, sería bueno que reflejara cuánto habían aprendido sobre el número 10.
Como saben el objetivo mínimo que nos exigen en Educación Infantil con la metodología tradicional es llegar hasta el número 10, concretamente contar del 1 al 9 y su representación gráfica, lejos queda el dominio de la descomposición. Por lo que, con más motivo, deseaba comprobar cuánto sabían en base al método ABN y que conocimientos añadidos llevaban ya adquiridos.
En mi clase, son numerosas las actividades de descomposición numérica, en otras entrada de mi blog, pueden ver cómo la hemos trabajado:
- Reparto irregular. Los amigos del 10
- El número protagonista. El 10
- ¿Qué sabemos del número 5?
Con los alumnos/as nunca se sabe hasta donde pueden llegar y con el ABN la incertidumbre se multiplica. El resultado ¡me quedé con la boca abierta! Y como una imagen, vale más de mil palabras, esta es la foto de mi pizarra.
Extraordinario cuando crearon la primera resta, percatándose de la relación entre números, maravilloso cuando restaron pasando la centena y espectacular cuando realizaron la descomposición con más de dos sumando. Así, descomponen mis niños y niñas de mi clase de 5 años, sin trampa ni cartón, ¡Esto es ABN!
Para que quedara este resultado recogido en nuestro mural: "PRIMAVERA ABN", cada niño/a escribió la operación que le gustaba en un bonito pez, para posteriomente, colorearlo y recortarlo.
Una vez todos listo, nos pusimos manos a la obra para decorar nuestra pared. ¡Precioso nos quedó! Yo, feliz como una perdiz, muy orgullosa de mis alumno/as y fascinada con la metodología ABN.